Si la vida es sufrir,
carecer y olvidar,
¿vale la pena vivir?
Cierto, ni es todo sufrir,
ni todo carecer y ni todo olvidar.
Eres afortunado,
vives en la paz
y no la guerra.
¡Qué importa el sufrimiento!,
cuando has vivido mucho más alegrías
y placeres de la vida.
Tienes proyectos, metas y sueños,
a la vez distracciones y recreaciones.
Hoy haces poesía
y el límite es la fantasía.
Por eso las ilusiones ilusionan,
cuando viajamos,
tenemos un nuevo amor
o la creencia que hay vida después de la muerte.
Estoy ilusionado con la poética,
hacer de la cultura del pueblo un arte,
por eso me llevo también con el arte,
le cuestiono y me contesta.
Me indica los sueños del pueblo
y que tienen que ver con la otra realidad,
el horror, el temor y miedo que causa la muerte.
El arte como ilusión,
despeja mi mente
y mis sueños.
… me disuelvo con el arte y el sueño.
Mi vida se acciona con el arte,
quiero dedicarle un poema a mi pueblo
y hacerlo a través de su sentires.
Por eso sueño que vivo eternamente,
pero es una ilusión y vivimos en la mentira,
costumbre predilecta del vivir.
No existen ilusiones verdaderas,
por eso creamos fantasías
y realizamos obras de arte.
En el pueblo se hacen muchas artesanías,
buenas, bonitas y baratas,
son poder de creación,
pero para que sea obra de arte,
depende del arte, artista y la sociedad.
Autor: J Francisco Gutiérrez Torres
Ilustraciones: Banco de imágenes google
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